Un Paraíso Acuático en el Valle del Lecrín

Imagina un lugar donde el agua fluye libremente, alimentando exuberantes plantaciones de cítricos y frutales, un escenario que parece salido de un sueño. Así es el Valle del Lecrín, un rincón de Granada aún poco explorado, donde los visitantes pueden disfrutar de una experiencia única y auténtica lejos de las multitudes.

El municipio de El Valle, compuesto por los pintorescos pueblos de Melegís, Restábal y Saleres, es el punto de partida hacia esta aventura acuática. Entre sus muchas joyas, el sendero del Barranco de Luna se destaca, ofreciendo un refrescante escape incluso en los días más calurosos del verano.

El Fascinante Pasado de Melegís

Melegís no solo es conocido por su belleza natural, sino también por su historia. Los restos de antiguos baños termales, aunque hoy abandonados, cuentan historias de un pasado que aún resuena en las piedras del lugar. Estos vestigios, accesibles a través de la Ruta del Azahar, ofrecen una ventana al pasado en medio de la serenidad del presente.

Béznar: Naturaleza en Estado Puro

No muy lejos de estos pueblos, el embalse de Béznar abre sus aguas al visitante. Accesible desde el mismo pueblo a través de las calles San Antón o Antonio Machado, Béznar es un destino que promete un día lleno de actividades y relajación.

Con instalaciones que incluyen áreas para barbacoas, un parque infantil y zonas para deportes náuticos como el remo y el piragüismo, Béznar es el lugar perfecto para disfrutar al aire libre. Y lo mejor es que no se necesita pagar entrada para disfrutar de este entorno natural inigualable.

Rutas de Senderismo para Todos los Gustos

Para los amantes del senderismo, Béznar es solo el comienzo. Desde aquí parten varias rutas que pueden ser recorridas a pie o en bicicleta de montaña. La ruta de la Cascada de los Bolos, la del Mamut y la del castillo de Lojuela son accesibles y ofrecen vistas espectaculares, perfectas para inmortalizar en una fotografía.

Estas rutas son mayormente circulares y pueden completarse en dos o tres horas, dependiendo del ritmo del viajero. Un recorrido que combina ejercicio, paisajes memorables y un contacto íntimo con la naturaleza.

Precauciones para un Baño Seguro

Aunque el embalse de Béznar no está oficialmente catalogado como apto para el baño, muchos eligen disfrutar de sus aguas claras bajo su propio riesgo. La recomendación es simple: precaución. La profundidad puede variar repentinamente, por lo que es crucial entrar y salir del agua con cuidado.

Sin la presencia de socorristas, cada nadador es responsable de su propia seguridad. Disfrutar de un baño refrescante en este entorno natural es una tentación difícil de resistir, pero siempre debe hacerse con responsabilidad.