Imagina dormir en un lugar donde la temperatura es siempre perfecta, sin la necesidad de un ventilador o aire acondicionado. En Granada, este sueño se hace realidad al hospedarse en casas-cueva, refugios históricos que ofrecen un clima constante y un silencio envolvente. ¿Te atreverías a vivir como lo hacían nuestros ancestros, pero con modernas comodidades?

Estas fascinantes moradas se encuentran en varios puntos de la provincia, desde Alhama de Granada hasta el mágico Altiplano, con epicentro en Guadix. Este último es conocido no solo por su impresionante cantidad de casas-cueva, sino también por su rico patrimonio arquitectónico.

La Aventura de Dormir Bajo Tierra

En el Geoparque de Granada, que se extiende por casi 5,000 kilómetros cuadrados, la experiencia de dormir en una cueva se convierte en algo más que un simple alojamiento: es una aventura. Este entorno natural y cultural ofrece una conexión íntima con la tierra, donde puedes sentir la historia y el paso del tiempo en cada rincón.

Guadix, una joya escondida de Andalucía, no solo cuenta con cerca de dos mil casas-cueva, sino también con una vibrante historia reflejada en su catedral renacentista y barroca. Cada esquina de este lugar te invita a explorar y a descubrir su legado, desde su alcazaba hasta su plaza porticada.

Cuevas que Cautivan y Atraen

• Casa-Cueva El Algarrobo: Perfecta para grupos grandes, con capacidad para siete personas y todas las comodidades modernas. Ubicada en el corazón del barrio de las cuevas, cuesta 188 euros por noche.
• Cueva Soledad: Ofrece una terraza con barbacoa y espacio para ocho huéspedes, a 180 euros la noche, más un suplemento de limpieza.
• Preciosa Casa Cueva en Airbnb: Ideal para viajeros con presupuesto ajustado, válida para seis personas a tan solo 30 euros por día, ofreciendo confort y conectividad.
• Cueva Zambrano: Situada cerca de Purullena, con piscina y capacidad para seis personas, por 96 euros la noche.

Un Entorno de Ensueño

Más allá de las cuevas, el entorno de Guadix te ofrece una escapada perfecta de la rutina diaria. Al estar a 950 metros sobre el nivel del mar, la ciudad garantiza noches frescas y mañanas agradables, incluso en verano. La oferta gastronómica local completa la experiencia, permitiéndote disfrutar de las delicias andaluzas rodeado de un paisaje único.

Conclusión: Tu Próxima Aventura Te Espera

Decidirte a dormir en una cueva en Granada es más que una elección de alojamiento; es una invitación a descubrir una parte de la historia y a disfrutar de un confort inigualable. Con su temperatura constante y el silencio envolvente, estas casas-cueva representan un refugio perfecto del calor abrasador del verano. ¿Estás listo para vivir una experiencia única en el corazón de Andalucía? Empaca tus maletas y aventúrate a un viaje que recordarás para siempre.

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